El primer concierto de verdad al que fui fue al de la última gira que hizo Bob Marley antes de morir en 1981. Yo era insultantemente joven en 1980, pero iba bien acompañado por mi amigo-hermano Ramón Martínez. Para la ocasión recuerdo que pillamos dos talego de costo y un paquete de Paxton. Del Paxton sacábamos las boquilla de plástico para no hacer boquillas de cartón. Gracias a la máquina de liar cigarros de su abuelo pudimos hacer veinte porros que después pusimos dentro del paquete de Paxton. Así pudimos fumarnos porro tras porro como si fuesen cigarrillos. Sobra decir que la Plaza de toros Monumental parecía un gigante fumadero de hachís. Al terminar el concierto se encendieron las luces de la plaza y aquello parecía una chimenea descomunal de humo cannábico. Recuerdo que mucha gente le lanzaba porros al escenario, y él muy contento los recogía y se los fumaba mientras cantaba.
De Ramón Martínez, diré que era mi referente. Era tres años mayor que yo y era de lo más espabilado. Lo último que supe de él es que acabó siendo Dj en el Zig Zag y RRPP de algún garito más de la zona. Al final se comentaba en el barrio que se lio con una modelo y se fueron a vivir a NY. Gracias a él empecé a tocar el bajo después de probar el suyo, una imitación de Gibson. Me encantó porque la verdad es que ya estaba bastante aburrido de la guitarra que llevaba tocando desde los seis años.
Bob Marley llegó a Barcelona porque pasaban por la tele anuncio de los pantalones Lois, con la canción Three Little Birds, pero con letra inventada para la ocasión y cantada por otra persona, una versión de lo más desafortunada.
La canción se hizo muy famosa y el promotor de conciertos Gay Mercador aprovechó para traerlo a Barcelona y Madrid gracias al tirón del anuncio.

Del evento solo quedan imágenes del sounchekeck

Pero el concierto creo que fue el mismo de la misma gira de 1979

El siguiente concierto importante al que asistí fue al de The Police. También en la monumental, organizado por Gay & Company y patrocinado esta vez por otra marca de tejanos llamada Old Chap.
Mis amigos y yo nos sentamos en la grada, ya que no éramos demasiado fans de la banda. Recuerdo que a nuestro lado había un tipo con una enorme grabadora de bobina y un enorme micro. Era uno de aquellos freaks que se dedicaban a grabar los conciertos para después vender los casetes piratas.
Una de esas cintas llegó a nuestras manos y pudimos oírnos gritar insistentemente “So Lonely, hijo puta»

La festa del Treball de 1980 fue en la explanada de la fuente mágica de Montjuïc. Esta vez nos colamos subiendo a lo más alto de uno de los palacios y bajando por la parte que ya estaba dentro del recinto.
Los Ramones y Mike Oldfield nos esperaban dentro.

A Bruce Spingsteen lo vimos en el Palau dels Esports de Montjuïc, en la época en que colarnos en los conciertos se convirtió en nuestro deporte favorito, más que nada era por la adrenalina de la aventura, escondiéndonos de los seguratas y de la policia, la verdad es que Bruce Springsteen nos la traía al pairo.
Para la ocasión nos juntamos una serie de descerebrados que a base de pedradas reventamos una de las ventanas del Palau. Escalamos para entrar en una estancia totalmente oscura. Yo oía gritos cada segundo y golpes extraños, y es que lo que en la oscuridad pensábamos que era el suelo, en realidad eran un montón de flaycase enormes, por lo que tal como avanzaba la gente caían al suelo desde lo alto. Por suerte nosotros íbamos detrás y bajamos tranquilamente mientras los demás se revolcaban por el suelo de dolor.

AC/DC llegó a Barcelona un 15 de enero de 1981. Presentaban su ultimo disco Hells Bells con Brian Johnson de cantante. Bon Scott moría un año antes. La autopsia oficial revelaría que el cantante había muerto ahogado en su propio vómito después de una orgía de drogas y alcohol.
El concierto empezó con una campana gigante bajando desde el techo y Brian Jones aporreándola con un gran martillo. Por lo visto lo siguen haciendo antes de tocar la canción Hells Bells.

Del primer concierto de Motorhead en Barcelona jamás olvidaré a los teloneros que eran Tank, y la salida de la banda para dirigirse al hotel. Sólo éramos tres o cuatro y ya hacía rato que el concierto había terminado. Me dio la mano Lemmy Kilmister y casi me la destroza con tanto anillo en sus dedos, después me la dio Philty Animal Taylor y por último Fast Eddie Clarke. Hoy en día hubiese sido un selfi en toda regla, pero en aquella época éramos más clásicos. Todavía conservo la camiseta del European Tour 81.

Así sonaban en aquella gira

En 1982 en Studio 54 de Barcelona se organizó un festival para recaudar fondos para los damnificados por el síndrome tóxico derivado por el consumo de aceite de colza desnaturalizado que afectó a más de 20.000 personas en todo el país. En el festival actuaron Tino Casal, Antonio Flores, Ramoncín. Obús y alguno que otro más que no recuerdo.

En 1983 Miguel Ríos estaba de gira con su “Rock de una noche de verano» y pasó por Barcelona. El lugar elegido elegido para hacer el concierto fue la Av. María Cristina. Cerraron toda la zona para que no se colase nadie y montaron el escenario en la parte alta de la avenida. Más que un concierto de Miguel Ríos podría decirse que fue un mini festival ya que antes que él tocaron Luz Casal y Leño.
La venta de entrada fue un desastre y éramos más los de fuera que los de dentro. Al final el promotor decidió abrir las puertas y dejarnos entrar a las miles de personas que esperábamos.
Fue una buena decisión que no gustó nada a los pocos que habían pagado, pero mejor un concierto multitudinario que uno para cuatro gatos.

Pero un año antes de su Rock de una noche de verano, inauguró el Mundial de futbol del 82 en el Paseo de Colón de Barcelona, donde pudimos ver uno de los ridículos más espantosos protagonizado por el locutor de radio Luis del Olmo. El concierto fue retransmitido para todo el país. La sociedad en general no estaba acostumbrada a este tipo de espectáculos. Sólo unos pocos éramos asiduos a los conciertos de rock and roll, pero para la inmensa mayoría de asistentes a este concierto gratis, era la primera vez. Se calculó que asistieron 200.000 personas. Ridículo absoluto de Luis del Olmo. Yo soy Miguel Ríos y lo echo a patadas del escenario.

Poco después del concierto del aceite de colza en Studio 54 pude ver a Robert Plant, ex cantante de Led Zeppelin, en un concierto de lo más psicodélico. El año no lo recuerdo.

Unos cuantos años más tarde vi a Jimmy Page & Robert Plant en el Palau dels Esports de Montjuïc, debía ser más o menos en 1995

Por razones de edad nunca pude ver a Led Zeppelin en directo pero en este concierto puedo decir que al final los pude ver, eso sí, sin John Bonham, fallecido en 1980, ni John Paul Jones.